Rendimientos:
21 Raciones
Dificultad: Media
Tiempo de preparación: 3 h 30 min
Tiempo de cocinado:
10 min
Tiempo total:
3 h 40 min
Hoy es el día internacional de la croqueta, y por eso traemos estas riquísimas croquetas cremosas de cecina y queso brie.
A quién no le gusta una buena croqueta, y si son sin gluten mucho mejor!!
Si que es cierto que es un poco engorroso hacerlas, pero de verdad que merecerá la pena. No sé si a vosotros os pasa, las primeras intento hacerlas de un tamaño normal, pero según avanzas con la masa cada vez son más grandes, las ganas de terminar de montarlas será jajajajaja.
Ingredientes
Ajustar las raciones
Instrucciones
- Con ayuda de un robot de cocina picamos la cecina y la reservamos. Picamos la cebolleta finita y la pochamos en la mantequilla con una pizca de sal, cuando esté blandita añadimos la harina, y con ayuda de unas varillas removemos bien para integrar la mantequilla con la harina, así ayudamos a que esta última se cocine y no quede cruda.
- Ahora echamos la leche poco a poco, sin parar de remover con las varillas para evitar grumos, seguimos así hasta incorporar toda la leche, veremos como la mezcla se va espesando. Ahora toca echar el queso, lo echamos en trozos pequeños y removemos bien.
- Para asegurarnos que no se queda ningún trozo de queso entero trituramos la bechamel con una batidora, así nos queda una bechamel lisa y sin ningún grumo.
- Con cuidado volcamos la bechamel otra vez en la sartén, echamos la cecina picada y removemos bien para integrarla en la masa, ponemos a punto de sal.
- Volcamos la masa en una fuente, cubrimos con film y llevamos al congelador por tres horas. Este paso es necesario, porque es una masa muy blanda y necesita bastante frío para poder manipularla bien.
- Transcurrido el tiempo la sacamos, vamos cogiendo porciones, las pasamos por harina, huevo y pan rallado, freímos en abundante aceite de oliva bien caliente. Cuando estén doraditas las sacamos, dejamos escurrir el aceite en un papel absorbente y pasamos a un plato, porque si no se reblandecen de estar en el papel, y las queremos bien crujientes por fuera y cremositas por dentro.
